ventanales

Cristales contra el cambio climático.

Cristales contra el cambio climático, y materiales que absorven el CO2.

Porque a todos nos preocupa el cambio climático, porque no nos gustan los inviernos que no llegan y los veranos que no pasan…. Os explicamos una nueva idea que viene a intentar suavizar un poco la situación.

ventanales

Científicos de la Universidad de Estocolmo han creado unos cristales denominados SGU-29 que atrapan el dióxido de carbono de forma mucho más eficiente que los materiales previamente conocidos, incluso en presencia de agua. Los cristales están hechos de un material estable, reciclable y con microporos para la absorción del C02 y el agua, que podría ser un gran aliado en la lucha contra el cambio climático.

Cooling towers and smoke stacks are seen at the coal powered Pocerady power station near Louny November 24, 2009. Czech Republic is heavily dependent on coal-burning power station. REUTERS/Petr Josek (CZECH REPUBLIC ENERGY ENVIRONMENT) CZECH/ CZECH/

Estos cristales absorben el dióxido de carbono, independientemente de la humedad ambiente, cosa que otros materiales que intentan también absorber el CO2 no pueden hacer si hay agua.

Estos cristales están elaborados con nanoporos y pueden ser un instrumento excelente para combatir el cambio climático.

No hay otro material en el mundo que consiga absorber el dióxido de carbono en presencia de humedad, es por ello que se trata de una gran noticia ya que podría ayudar a mitigar algunos de los efectos que provoca el cambio climático en todo el planeta. Dichos cristales han sido bautizados con el nombre de  SGU-29 y se trata de una colaboración entre científicos de diferentes zonas del mundo. Se espera que en 5 años puedan terminar definitivamente dicha herramienta y luchar contra el cambio climático.

Por otro lado tenemos los MOFs, otra gama de materiales que se encargan de recoger y almacenar el co2.

Los materiales, llamados MOFs, o armazones organometálicos, y que a veces son descritos como «esponjas de cristal», ya han demostrado anteriormente tener gran potencial para almacenar hidrógeno y metano.

Yaghi, de la Universidad de Michigan, compara el principio por el que los MOFs guardan el CO2 con poner un panal en un cuarto lleno de abejas. «Todas las abejas vendrán al panal, que es capaz de contener un número grande de ellas en un pequeño volumen. El material que hemos creado actúa como un panal para absorber el dióxido de carbono».

Los MOFs pueden fabricarse en grandes cantidades, y los ingredientes resultan económicos, dos cualidades destacables, ya que es crucial encontrar una forma eficaz y barata de reducir las emisiones de CO2.

La mayoría de países del mundo está usando más energía que nunca antes en la historia de la humanidad, sabemos que esta tendencia continuará aumentando, y es necesario rectificar la cantidad de CO2 liberado a la atmósfera al quemar combustibles fósiles como el petróleo, el carbón y el gas natural.

¿Donde irán a parar los cementerios de materiales con absorción de CO2…?

       España no se queda atrás, la empresa Geosilex Trenza Metal (Zamora, España) ha desarrollado un proyecto de investigación en colaboración con la Universidad de Granada que ha tenido como resultado la patente de un nuevo material de construcción denominado Geosilex, una cal con una elevada capacidad de absorción de CO2 ambiental. La materia prima de este producto innovador son desechos industriales. El proceso de fabricación contribuye a reciclar residuos, a crear un material de construcción con una huella de carbono cero y a captar CO2, de manera que medioambientalmente resulta muy rentable.

img_7990

¿Y qué se puede hacer con el Geosilex? Además de sustituir a la cal, su capacidad para combinarse con el hormigón hace que sus usos en construcción sea muy variados, por ejemplo, en obras públicas o pavimentos. Hasta el momento, una de las obras más llamativas realizadas con el nuevo material de construcción es el parque de la Campa de los Ingleses de Bilbao.

Esperamos que esto sean soluciones válidas para mejorar nuestra atmósfera.